L’art ha perdut el senderi
417 febrer 2012 per yeagov
O el dictador “in effigiem” congelat
Diguin-me perepunyetes, però crec que l’art, especialment la pintura i l’escultura han perdut el senderi. Ja ho sé que fa unes setmanes un article meu sobre una escultura d’un museu de Dortmund (“Quan sigui gran vull ser artista“) va provocar les ires d’una persona (o persones) que es va (o van) molestar per la meva crítica a una escultura a la que vaig titllar de pressa de pèl. Si, ja ho sé que l’art s’ha de renovar, encara que no sé si en el cas del que immediatament parlarem es pot parlar de renovació artística.
Un dictador dins d’una màquina de refrescos
L’artista Eugenio Merino va presentar a la fira ARCO de Madrid l’obra “Siempre Franco”, aquesta obra consisteix en una escultura del dictador (feixista espanyol i cabdill de les Espanyes) Francisco Franco dins d’una màquina de refrescos amb els colors que recorden a la marca de l’”espurna de la vida”. L’escultura del dictador sol estar exposada a la pinacoteca (exposició de quadres) barcelonina AND. L’escultura realista del dictador està valorada en uns 30000 euros. Però això només és la meitat de la notícia.
La Fundación Francisco Franco es querellarà contra l’autor
Jaime Alonso, vicepresident de la Fundación Francisco Franco, ha anunciat que anirà a l’exposició acompanyat per un notari i per a fer fotos amb el propòsit de demandar l’autor de l’obra, Eugenio Merino, a la fira ARCO – “responsable civil subsidiari”, segons el vicepresident de la fundació fatxa – i al recinte on se celebra la fira, IFEMA. Segons Alonso, aquesta escultura atempta contra el sentit de l’art i l’estètica. Té raó, però té el mateix sentit de l’estètica i l’art que el règim franquista, del qual la Fundació Francisco Franco és la principal apologista, que va sembrar les Espanyes d’escultures eqüestres del cabdill, i allò si que feia mal als ulls.
Ja no em miraré les màquines de refrescos de la mateixa manera
Que els partidaris d’un dictador que va fer-se construir un mausoleu que s’ha convertit en punt de peregrinació de tota la ultradreta carpetovetònica per a la major glòria del dictador es molestin per aquest particular homenatge al cabdill (per la gràcia de Déu) de les Espanyes amb una efígie del dictador dins d’una màquina de refrescos quan el de debò està ficat en un megàlit faraònic sembla una broma de mal gust, aquesta si. No és la FFF la que s’ha d’ofendre perquè un autor posi una escultura dins d’una màquina de refrescos de la coneguda marca de l’”espurna de la vida” sinó aquesta marca la que s’hauria d’ofendre pel fet que dins d’una de les seves màquines de begudes hi hagi l’escultura d’un tirà.
El arte ha perdido el tino
O el dictador “in effigiem” congelado
Díganme tiquismiquis, pero creo que el arte, especialmente la pintura y la escultura han perdido el tino. Ya sé que hace unas semanas un artículo mío sobre una escultura de un museo de Dortmund (“Quan sigui gran vull ser artista“) provocó las iras de una persona (o personas) que se molestó (o molestaron) por mi crítica a una escultura a la que voy califiqué de tomadura de pelo. Si, ya sé que el arte se renovará, aunque no sé si en el caso del que inmediatamente hablaremos se puede hablar de renovación artística.
Un dictador dentro de una máquina de refrescos
La Fundación Francisco Franco se querellará contra el autor
Jaime Alonso, vicepresidente de la Fundación Francisco Franco, ha anunciado que irá a la exposición acompañado por un notario y para hacer fotos con el propósito de demandar al autor de la obra, Eugenio Merino, en la feria ARCO – “responsable civil subsidiario “, según el vicepresidente de la fundación facha – y en el recinto donde se celebra la feria, IFEMA. Según Alonso, esta escultura atenta contra el sentido del arte y la estética. Tiene razón, pero tiene el mismo sentido de la estética y el arte que el régimen franquista, del que la Fundación Francisco Franco es la principal apologista, que sembró las Españas de esculturas ecuestres del caudillo, y aquello si que hacía mal los ojos.
Ya no me miraré las máquinas de refrescos de la misma manera
Que los partidarios de un dictador que se hizo construir un mausoleo que se ha convertido en punto de peregrinación de toda la ultraderecha carpetovetónica para la mayor gloria del dictador se molesten por este particular homenaje al caudillo (por la gracia de Dios ) de las Españas con una efigie del dictador dentro de una máquina de refrescos cuando el de verdad está metido en un megalito faraónico parece una broma de mal gusto, esta sí. No es la FFF la que se ha de ofender porque un autor ponga una escultura dentro de una máquina de refrescos de la conocida marca de la “chispa de la vida” sino esta marca la que se debería ofender por hecho que dentro de una de sus máquinas de bebidas haya la escultura de un tirano.
BUSCANT RAONS 
Yo creo que el artista, porque parece un artista, hace una creación con la figura del dictador del siglo XX y una máquina donde se expenden bebidas/refrescos helados al parecer de Coca Cola, marca conocida por todo el mundo. Entiendo que Merino quiere llamar la atención con su obra, causar impresión y lo logra. Creo que su arte, contemporáneo, es lo que llamamos Arte extremo o impacto. También podríamos decir que su creación es una especie de caricaturización a la que todos los personajes famosos están expuestos en algún momento de sus vidas.
Hay que decir que Merino no inventa nada. Cierto, Merino busca la provocación, si hubiera hecho una escultura anodina nadie hablaría del tema, ha logrado la atención mediática que puede atraer a compradores de otras piezas.
Muchos artistas contemporáneos piensan que en el arte no deben existir restricciones, pero que a veces se ponen barreras en otros planos. No habría ningún límite formal. “Los límites entran en el plano de la legitimidad social y la circulación de esa obra en una sociedad determinada, entonces habrá algunas en las que ese tipo de trabajo podría tener dificultades de circulación o de inscripción. Y en la intervención y empleo de materiales determinados, si esa sociedad considera que el sujeto incurre en delito, lo va a encauzar”..
Otros piensan que .“No debieran existir límites para la creación, que cuando uno intenta ponerle una barrera, un cerco al arte, es porque la sociedad está mal, es porque es una sociedad dictatorial y autoritaria“,
Yo creo que Merino lograr llamar la atención con su creación.
En ningún momento he hablado de poner restricciones al arte, lo que no creo es que todo lo que se expone en las salas de un museo de arte es arte.
Esta escultura si es arte:
http://www.panoramio.com/photo/67192743
http://www.panoramio.com/photo/67191332
En mi opinión esto otro no: